Cuento realista de 1er. año A- E.E.S.A Nº1
Las mentiras tienen patas cortas
Había una vez una chica que se llamaba Celeste, caminaba tranquilamente por la calle, cuando de repente llegaron sus amigas todas coquetas. Era muy tímida cuando participaba en clases y en otras actividades decía todo que no y después se seguía soltando de a poco y hace un mes se puso de novia.
Hace dos días tuvo un accidente y su mamá no sabía nada y le preguntó:
-¿qué te pasó?
-nada me caí, respondió ella
Celeste le había mentido a su mamá, como era de costumbre.
Antes del accidente, se había ido a la plaza a ver a su novio. Él se llamaba Juan Pérez, era un chico muy atrevido y contestador en clases, siempre en la hora de matemática y de literatura les contestaba a sus maestros. Alto, con muchos rulos, ojos claros y muy inteligente.
Un día, en clases de matemática Juan le contestó atrevidamente a su profesora:
_ ¿Juan podes copiar? que el resto de tus compañeros ya terminaron! – dijo la profesora.
_ ¡no, no tengo ganas de copiar! Borrá… no me importa- dijo él.
Pasaron unos años y cumplieron 17 años. Él le comentó a su novia, irse de vacaciones a Pinamar… obviamente que sus padres no sabían ni tampoco le iban a comentar.
El guardavida llamó inmediatamente a una ambulancia y la trasladaron a un Hospital, de ese lugar. Inmediatamente llega su novio y ella le pide muy asustada que quiere ir a su casa con sus padres.
Una vez ya en Juárez fue a su habitación, reflexionó y habló con sus padres.
Al día siguiente, ella se dio cuenta que tenía la culpa por haberlo seguido a su novio y decidió que su vida cambiaría. Al terminar sus estudios, se fue a estudiar arqueología. Siempre fue muy inteligente, le gustaba mucho la escuela. Pero, al seguir los pasos de su novio, ella había cambiado.
Hasta el día de hoy, ella no sabe nada del paradero de su novio y ni se volvieron a juntarse más.
Anónimo
CONTINUARAN ESTAS HISTORIAS REALISTAS. NO DEJES DE LEERLAS